miércoles, 29 de agosto de 2018

LA CARRETA




En la ciudad de Tuxtla Gutiérrez muchos de los habitantes están seguros de que cada noche pasa algo sobrenatural en las calles. Al llegar la media noche se escuchan algunos ruidos que vienen desde la iglesia del centro y que siempre terminan en la casa de una persona que está agonizando.
Todo comenzó en los 80´s, cuando un anciano estaba moribundo y ya se había despedido de sus familiares. Esa noche se escuchó salir desde la iglesia de San Pascual a una vieja carreta de madera que jalaba un monje con una larga túnica que le cubría el rostro. Las personas no quisieron asomarse pues tenían mucho miedo ya que era la media noche.
El clima cambió repentinamente, las calles se llenaron de neblina y hacía mucho frio. La carreta se detuvo justo a la puerta de la casa del anciano agonizante y a los pocos minutos el hombre falleció. Entonces la carreta se fue regresó nuevamente a la iglesia llevando encima lo que parecía una especia de bulto. Las personas aseguran que esta carreta se encarga de llevarse a los difuntos para acompañarlos en su eterno descanso al más allá.
Algunos dicen que este misterioso monje es un esqueleto enviado por la Muerte para hacer su trabajo y recolectar las almas de los difuntos. Siempre que hay una persona enferma o agonizante en el pueblo, su familia reza porque esta carreta no se detenga afuera de la casa. Los que se asoman por la ventana para verla corren el riesgo de ser llevados por ella y morir.
En Tuxtla aún se puede escuchar salir la carreta de San Pascual desde la iglesia sin saber hasta dónde va a parar. Pero siempre regresa con el alma de una persona para meterla a la iglesia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario