La
leyenda nos relata que por el año de 1718 cayó en la ciudad de Monterrey una
lluvia torrencial que duró 40 días e inundó gran parte de esta localidad.
En ese
entonces, afuera de la ciudad hacia el poniente, vivía una India tlaxcalteca
esposa de un zapatero, que guardaba en su casa una imagen de la virgen de La
Purísima y cuando las aguas desbordadas del río llegaron a ese barrio, se dice
que la piadosa mujer acercó con fe la imagen al borde de las olas.
Casi de
inmediato, la corriente perdió fuerzas y se salvaron de la inundación aquella
barriada y la ciudad también.
Este
milagro influyó para que esa mujer construyera una pequeña capilla que llamó
casa de la virgen, donde las mujeres de esa época iban a rezar todos los
sábados, aunque el lugar estaba fuera de la ciudad.
Actualmente
el templo que se encuentra en ese lugar refleja la arquitectura religiosa
moderna de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario