El
Kieri es un arbusto de la familia Solanaceae, de los géneros Datura y Solondra,
psicotrópica y de esencia maligna, relacionada con Kieri Téwiyari, dios del
viento y patrono de los brujos.
La planta es considerada
como peligrosa, y los huicholes no aprueban su uso indiscriminado. Pero la
planta es atractiva e invita a ser usada.
Eso fue lo que le pasó a un
joven llamado Rayo de Luna.
Rayo de Luna vivía en una
comunidad huichola.
Tenía diecisiete años y se
encontraba en la edad en la que los jóvenes están interesados en descubrir la
vida y sus recovecos.
Un buen día, decidió que
debía probar el Kieri que tanta prohibición tenía entre los marakames de su
pueblo, y fue en busca de la planta.
En el campo se encontró con
dos tipos de Kieri, la una era la llamada kielista, “Kieri malo”; y la otra era
el Kieri real o “verdadero Kieri”. Como no sabía de cuál tomar, tomó una parte
de cada una de las especies.
Al poco rato, empezó a tener
horribles visiones en las que veía a un mara’akáme horripilante que le enseñaba
el uso del toloache para que pudiera conquistar a las mujeres más hermosas de
su comunidad y para que se transformara en diversos animales.
El chamán era nada menos que
Kieri Téwiyari, Persona Kieri, quien deseaba perder a Rayo de Luna.
Hermano Mayor, Kauyumaric
apareció de entre las alucinaciones del joven para salvarlo de las malas artes
de Kieri Téwiyari, pero nada logró y el joven seguía viendo horrorosas
visiones, en un estado que culminaría en la muerte segura.
En esa terrible situación se
encontraba cuando de pronto fue visto por su padre que pasaba por los parajes
en los cuales Rayo de Luna se había escondido y que pensaba seguros.
Cuando el hombre le vio, pidió
ayuda y lo llevaron directamente con el marakame del pueblo.
Al verlo en un profundo
sueño, el chaman ya no pudo despertarlo, y el joven murió al cabo de algunas
horas, presa de las más inverosímiles pesadillas. El malvado Kieri Téwiyari se
lo había llevado a sus oscuros refugios.
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